Tres razones por las que las personas 'cangrejean' o tienen sexo con sus ex

Una de las situaciones más comunes entre las parejas que llegan a una ruptura es el famoso “cangrejeo”, el hábito de volver a tener encuentros sexuales o amorosos una vez el vínculo se rompió. Los involucrados suelen buscarse entre sí, hablar y revivir situaciones íntimas que tenían cuando sostenían un romance oficial o formal.

Las exparejas dejan de lado las incomodidades y los ‘rayes’ para concretar sus encuentros en un espacio sexual, donde disfrutan ocasionalmente de ciertas experiencias. No obstante, esta conducta tiene tres razones que fueron explicadas por un estudio publicado por el sitio especializado ‘Psychology Today’.

El medio se basó en los resultados publicados por la revista ‘Evolutionary Psychology’, donde un experto contaba los motivos por los que las personas solían mantener relaciones sexuales con sus ex después de ponerle fin a la relación. Los análisis surgieron de un estudio realizado a mujeres y hombres entre los 21 y 32 años de edad.

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De acuerdo con lo que se informó, esta investigación reclutó distintos grupos de personas para llegar a una conclusión de esta práctica, descubriendo tres razones exactas en las que se basan los involucrados para buscar a sus exparejas al momento de querer tener sexo.

Según se publicó, la primera razón era ‘Motivos de mantenimiento de la relación’, es decir, los elementos emocionales del sexo de ruptura, como seguir enamorados, añorar o extrañar a esa persona. En varios casos se une al tema de la atención.

En segundo lugar, se ubican los ‘Motivos hedonistas’, los cuales se centran en elementos agradables y físicos en estos encuentros. Todo se conecta con la diversión, aliviar una tensión sexual o simplemente verse como una satisfacción de necesidades íntimas.

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Por último, el estudio arroja que la tercera razón son los ‘Sentimientos ambivalentes’, los cuales van ligados con las emociones en el aire o no resueltas. En muchos casos se presenta como una forma de lidiar con el dominio de la persona, llevar sexo “con odio” o superarlo con otro tipo de vínculo.

Esta investigación también señaló que algunas personas analizadas aseguraron que lo hacían como forma de despedida o como una situación ocasional.