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¿Por qué recordamos unos momentos y olvidamos otros? Esto dice la ciencia
La ciencia ha desentrañado los misterios detrás de nuestra memoria selectiva y te revelaremos las razones.
Por:Un reciente estudio llevado a cabo por investigadoras de la Universidad Rice, en Estados Unidos, analiza las complejidades de la memoria humana y los factores que determinan qué eventos recordamos y cuáles olvidamos.
Las autoras Fernanda Morales-Calva, estudiante de posgrado en ciencias psicológicas, y Stephanie Leal, profesora adjunta del mismo departamento, desarrollaron un análisis exhaustivo basado en lo que denominaron las "tres W" de la memoria: qué, dónde y cuándo recordamos.
Sigue las noticias de La Mega en WhatsappEl trabajo, titulado "Dime por qué: La W faltante en el qué, dónde y cuándo de la memoria episódica", fue publicado en la revista Cognitive, Affective & Behavioral Neuroscience. Este estudio recopila investigaciones previas para entender mejor por qué ciertos eventos quedan grabados en nuestra mente, mientras que otros desaparecen con el tiempo.
Las tres W de la memoria: una visión integral
El análisis destaca que la memoria no es una experiencia homogénea ni universal; lo que es significativo para una persona puede ser irrelevante para otra. "Esta revisión destaca la importancia de considerar la subjetividad y el contexto en la investigación de la memoria", afirmó Leal.
Las autoras identificaron que factores como la importancia emocional, la relevancia personal, la repetición y la atención son determinantes en la retención de recuerdos.
El contenido emocional y la relevancia personal juegan un papel fundamental. Eventos cargados de emociones profundas, como momentos felices o traumáticos, tienen más probabilidades de ser recordados. Del mismo modo, los detalles que se perciben como significativos en un nivel individual o cultural son más fáciles de retener.
La dimensión espacial también es fundamental. Según las investigadoras, entornos novedosos exigen mayor atención, lo que fomenta recuerdos más duraderos en comparación con lugares familiares. Por otro lado, la temporalidad influye en la estructuración de los recuerdos.
"El ordenamiento de eventos y el reconocimiento de transiciones entre ellos facilitan la retención de experiencias", señalaron las autoras.
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Contexto cultural
El estudio también aborda las diferencias individuales y culturales que influyen en cómo las personas recuerdan. Morales-Calva y Leal destacan que muchas evaluaciones de memoria dependen de pruebas estandarizadas que no siempre reflejan las realidades de diversas poblaciones. Este sesgo puede impactar la precisión de los diagnósticos y tratamientos en ámbitos clínicos.
"Necesitamos enfoques más personalizados para evaluar la memoria y sus particularidades", indicó Morales-Calva. Esta perspectiva podría tener aplicaciones directas en el tratamiento de condiciones como la demencia o el deterioro cognitivo.
Implicaciones y aplicaciones prácticas
Comprender por qué algunos eventos son recordados mientras otros se desvanecen podría abrir la puerta al desarrollo de herramientas y estrategias para mejorar la calidad de vida, especialmente en una población global que envejece.
"Al tener en cuenta las variables subjetivas, podemos desarrollar herramientas de diagnóstico más precisas e intervenciones efectivas", agregó Leal.
La investigación sugiere que integrar las diferencias individuales en los diseños experimentales es clave para traducir los hallazgos en aplicaciones prácticas. Por ejemplo, los resultados podrían servir para crear estrategias de mejora de la memoria y fomentar intervenciones personalizadas para personas con enfermedades neurodegenerativas.