No te quedes desparchado: Cinco pueblitos baratos para visitar en Semana Santa

Guatativa

Está ubicado a 53 kilómetros de la capital colombiana. A los turistas les encanta este lugar por tener una estructura colonial. Los puntos de interés son el Museo Indígena, la iglesia de Nuestra Señora de los Dolores, el Coliseo y la Torre del Reloj.

Muy cerca de la cabecera municipal se encuentra el embalse de Tominé en el que es posible, practicar múltiples deportes náuticos como remo, vela, kayak y esquí acuático.

Ráquira 

Un recorrido por la calle principal y la plaza develará el gran colorido de las fachadas de casas y almacenes.

Además de comprar elementos decorativos, en Ráquira es posible disfrutar de cabalgatas guiadas y rutas ecológicas históricas de las cuales recomendamos aquella que lleva a la Piedra de La Campana.

Para los más pequeños de la familia hay talleres demostrativos de arcilla en los que se les enseñará a usar el material y crear sus propias figuras.

Zipaquirá 

Es asociada con la Catedral de sal que tiene 180 metros bajo tierra. Es un destino turístico por excelencia, para colombianos y extranjeros, al que se puede acceder en tren desde Bogotá.

En este lugar es posible visitar tres naves en las que se encuentran espejos de agua, obras alusivas a símbolos religiosos y hasta una sala de proyección de una película en 3D que hará del recorrido algo más didáctico.

Sin embargo, además de visitar el pintoresco pueblo de Zipaquirá, muy cerca está ubicado el parque Finkana, un espacio para que los niños puedan acercarse a la vida de una granja y aprendan mientras se divierten.

Villeta 

El clima perfecto, cálido y seco, te espera en Villeta, un lugar donde la caña de azúcar es protagonista y por ende la panela, el manjar más deseado. De hecho, una de las actividades más recomendadas es visitar una finca local para conocer el proceso de producción de la panela en trapiches artesanales e interactuar con los lugareños.

No puede dejar de visitar el Salto de los Micos al que se puede acceder haciendo cañoning. Adicionalmente, Villeta ofrece innumerables opciones de alojamientos, incluidas las fincas de recreo, para disfrutar de unos días de sol y piscina muy cerca de Bogotá.

Paipa 

No hay mejor lugar para degustar una tradicional almojábana que en este pequeño pueblo cerca de Bogotá, de no más de 28.000 habitantes.

Uno de sus principales atractivos son los baños termales que hacen parte de un complejo turístico en el que se puede disfrutar de actividades recreativas, como voleibol en arena y toboganes, o de los beneficios terapéuticos del agua con masajes, lodoterapia, cámara de burbujas etc.

Antes de terminar la estancia en Paipa vale la pena hacer un paseo en lancha por el Lago Sochagota y recorrer el pantano de Vargas para empaparse un poco de la historia de nuestro país.

Aprender sobre la cultura colombiana en familia siempre será una experiencia valiosa para los más pequeños, sin importar el destino elegido.