La aterradora experiencia que vivió un hombre en una finca de Nariño

Giovanny contó que en una finca de Nariño sucedían cosas muy raras; la primera de ellas es en el lugar se veía un perro de color negro subido en un árbol de mandarino, el segundo, que algo o alguien tocaba las puertas de las habitaciones y el tercero, que los candados de las rejas sonaban por sí solos. 

En algún momento de su vida, el hombre aseguró que tuvo que ir a quedarse en esa casa y fue con la que para ese entonces era su novia. Efectivamente tal y como le habían contado, esa noche a Giovanny le tocaron la puerta de la habitación dónde estaba durmiendo y al salir no había nadie, también lo llamaron por su nombre y él asegura que era la voz de su mamá, sin embargo, el hecho nunca pasó de acuerdo a lo dicho por su progenitora. 

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Dentro del relato, Giovanny contó que esa misma noche, a eso de las 12, una especie de molino de agua empezó a sonar por si solo y muy fuerte por lo que él quiso ir a ver de qué se trataba y fue entonces cuando vio una gigantesca figura de color negro que parecía una mujer y la cual, lo llamaba insistentemente hacía ella.

En ese instante, él llamó a su novia y a su mamá, pero al ellas llegar, la maquina dejó de moverse y todo quedó en silencio, por lo que Giovanny define ese suceso como una experiencia paranormal.