Consejos para tener una moteleada maravillosa

Llevar lo necesario:  es clave no llevar una maleta como si te fueras de viaje, ¡por favor son solo 4 horas!, quizás parezca increíble, pero hay casos de casos y no falta el que se lleva el cepillo de dientes, el secador, la toalla, una prenda de más, en fin; no lo hagan, entre menos cosas lleven será mucho mejor, más practico y evitaran dejar objetos olvidados.

Que la vergüenza no se apodere de ti:  entrar con toda la dignidad al motel y dejar a un lado el qué dirán o los prejuicios. Además, es más llamativo que dos personas traten de ocultar su cara, entrar con la frente en alto ayuda a no perder la dignidad y a despertar menos curiosidad.

Llegar en taxi: en su defecto entrar caminando, si la cuestión es de ahorrar, de lo contrario, será mejor ir en taxi y no en tu carro, sobre todo si es una ‘escapadita prohibida’. Llevar el carro propio te puede delatar y alguien que conozcas tendrá el chance de identificarte.

Disfruta y libérate: gózate el lugar, no es cerrar la puerta y lanzarse cual leona sobre su presa, más si es la primera vez de alguno de los dos en un motel. Incluso si la habitación tiene Jacuzzi has uso de ese servicio.

Explora el cuarto  y desinhíbete, pues nadie más te conoce ni te está viendo, quizás sí te escuchen, pero claramente tu escucharas a otros, pues es el lugar predilecto para rendirse ante las pasiones.

Por lo que tu visita a un motel se convierte en el momento para dejarte llevar y atreverte a probar y experimentar en ámbito sexual.

Lleva condones:  más allá del riesgo de apagar la llama por falta de preservativos en plena acción, recuerda que te expones a enfermedades o embarazos no deseados. Aunque en la mayoría de los moteles venden condones comprarlos cuando ya se había empezado con lo bueno pues no será muy cómodo, además evitaras cualquier inconveniente si eres tu quien lleva los condones y verifica su fecha de vencimiento y buen estado.

Como tips extra que, aunque parezcan obvios, algunos quizás no tengan en cuenta, es esencial ser pulcro y depositar los preservativos usados y cualquier otro tipo de desecho en la caneca de basura, pregunta por el tiempo que tienes disponible, pues recuerda que, si excedes las horas contratadas, tendrás que pagar de más y revisa muy bien el lugar antes de irte para que no tengas que devolverte a buscar algo que dejaste olvidado.