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El lado oscuro de Backstreet Boys y NSYNC: estafas, demandas y un imperio caído
Lou Pearlman llevó al éxito a Backstreet Boys y NSYNC, pero su historia terminó en prisión por fraude millonario.
Por:Detrás del fenómeno global que representaron Backstreet Boys y NSYNC en los años noventa, hubo un personaje central cuya historia terminó lejos del escenario y la fama. Lou Pearlman, el empresario que reunió y lanzó a estas bandas, operaba al mismo tiempo una de las estafas financieras más prolongadas de la historia de Estados Unidos.
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Sigue las noticias de La Mega en WhatsappEl origen del imperio de las boy bands
Pearlman fundó su sello Trans Continental Records tras observar el impacto comercial de los New Kids on the Block. Decidió replicar el modelo y contrató al exgerente de esa banda, Johnny Wright, para liderar el proyecto. Mediante audiciones masivas eligió a los integrantes de Backstreet Boys, quienes alcanzarían ventas multimillonarias y reconocimiento mundial.
Con el éxito consolidado, Pearlman apostó por NSYNC, un grupo ya formado pero sin mayor proyección. Bajo su dirección, Justin Timberlake y sus compañeros lograron fama internacional, alimentando el fenómeno de las boy bands durante más de una década.

Ganancias millonarias y contratos cuestionados
El modelo parecía exitoso, pero tras bastidores surgieron conflictos. Los artistas empezaron a cuestionar los ingresos y contratos firmados. En el caso de Backstreet Boys, Brian Littrell encargó una revisión legal que reveló que Pearlman figuraba como un “sexto integrante” del grupo en los contratos, llevándose un porcentaje mayor al de los demás.
NSYNC vivió una situación similar. Ambos grupos iniciaron acciones legales, acusando a Pearlman de tergiversar información y beneficiarse a costa del trabajo de los artistas. Las demandas se multiplicaron y otras agrupaciones, como O-Town, también denunciaron irregularidades.
La estafa detrás del productor
En paralelo al negocio musical, Lou Pearlman operaba un esquema Ponzi, atrayendo inversiones con empresas ficticias y documentos falsificados. Presentaba estados financieros alterados y usaba el prestigio de sus bandas para ganar credibilidad frente a bancos y empresarios.
Desde los años noventa hasta mediados de los 2000, recaudó más de mil millones de dólares a través de este sistema fraudulento. En 2006, tras ser investigado por irregularidades, fue localizado y arrestado en Indonesia. En 2008 fue condenado a 25 años de prisión por fraude, conspiración y lavado de dinero.
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Un legado empañado por el fraude
Lou Pearlman murió en prisión en 2016, a los 62 años. Aunque fue responsable del lanzamiento de dos de las bandas más influyentes del pop de los noventa, su historia quedó marcada por la estafa que perjudicó tanto a sus propios artistas como a decenas de inversionistas.
El caso expuso el lado más complejo de la industria del entretenimiento, donde el éxito comercial puede estar vinculado a prácticas empresariales cuestionables. Para muchos fans, la historia de Backstreet Boys y NSYNC no solo refleja el esplendor de una época, sino también las sombras que la hicieron posible.
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